Una bombilla LED es mucho más eficiente que las bombillas incandescentes y de bajo consumo, porque consumen menos y duran mucho más. ¿Merece la pena comprar LED a pesar de tener que hacer una inversión mayor? La respuesta, sin duda, es sí.
En apenas un año, la inversión realizada al comprar una bombilla LED queda amortizada, y teniendo en cuenta la subida continua de los precios de la luz, pronto será menor el plazo.
1. El mínimo consumo de una bombilla con leds compensa el pagar más por ellas.
Comparando con otras bombillas antiguas la tecnología LED no tiene competencia, pero realmente ¿cuánto dura cada bombilla?
Comparando modelos similares un halógeno de 50W (0.05kW/h) tiene una ida útil de 2.000 horas, una incandescente de 50W o un fluorescente de 36 W alcanan las 5.000 horas de media; pero una bombilla LED de apenas 4W puede alcanzar las 70.000 horas.
2. Los leds son mucho más eficientes: no malgastas energía.
Cerca del 98% de la energía que consume un LED se transforma en luz, esto implica que apenas se disipa energía en forma de calor. Ten presente que las clásicas incandescentes apenas aprovechaban un 5%, lo que significa que el 95% restante lo consumías para calentar la habitación.
En verano un buen conjunto de bombillas LED puede no sólo disminuir el consumo por iluminar tu casa, sino que se calcula que consumirás hasta un 50% menos de aire acondicionado.
3. Si cambias a la iluminación LED podrás ahorrar cerca de 10 € por bombilla.
Según un estudio reciente de LED y SPA (considerando que cada bombilla se enciende 5 horas al día, 30 días al año), el gasto de una bombilla LED sería de 0.82€ al año y el de una incandescente de 12,64 €.
Una diferencia tan grande, multiplicada por el número de bombillas que tienes, puede suponerte un ahorro de más de cien euros al año fácilmente.
4. Capacidad lumínica muy superior: más luz y de mayor calidad.
Las bombillas LED no sólo consumen menos, sino que tienen una mayor capacidad lumínica: con menos bombillas iluminarás el mismo espacio.
Además, gracias a sus características particulares, poseen un mayor rango tonal, que te permitirá elegir entre una gran variedad de blancos cálidos o fríos. Podrás crear ambientes a la carta, consiguiendo un hogar mucho más agradable y acogedor.
La iluminación de epacios interiores ha dado un gran salto cualitativo gracias a la iluminación LED.
5. Un nuevo mundo de posibilidades decorativas.
Además de la gran ariedad tonal de los leds, su versatilidad permite que cada día se desarrollen nuevas aplicaciones y diseños, que cubren todas las necesidades.
Hoy existen tiras LED para iluminación indirecta de estancias indispensables desde hace tiempo para los mejores decoradores del sector. Además, ya existen ejemplos como Philips LivingColors, que son modelos con tonalidades que iluminan en el tono que elijes en cada momento: desde suaves tonos pastel hasta ricos e intensos colores.
Philips LivingColors, disponible en Luz Alcalá Online, permite obtener varios ambientes con distintos colores
6. La luz más estable y resistente del mercado.
Las antiguas bombillas incandescentes y los tubos fluorescentes veían afectado su rendimiento al encenderse y apagarse repetidamente, disminuyendo considerablemente su vida útil. Las bombillas de bajo consumo tardaban un tiempo considerable en alcanzar su máximo de luminosidad, por lo que podían resultar molestas al necesitarse una luz inmediata.
Con las bombillas LED ambos problemas desaparecen: alcanzan su máximo de luminosidad casi instantáneamente, y además pueden encenderse y apagarse continuamente sin ver afectado su rendimiento. Su vida útil se mantiene.
7. Es ya una realidad cada vez más extendida.
Ya son muchos los hogares que han renovado su iluminación con bombillas con tecnología LED, alcanzando un crecimiento del 300% en el último año. Pero además, su implantación se extiende a muchos otros ámbitos como los alumbrados de las calles o las luces de automóviles.
Si no te has pasado ya, estás quedándote a la cola.
Las bombillas con LED son el futuro de la iluminación: son versatiles, consumen muy pocoa energía, no contaminan,…
Por Marta Rodríguez